viernes, 22 de abril de 2011

Wstabilidad en la gobernabilidad (y ii)



En la teoría del Estado y la gobernabilidad, tres son las corrientes fundamentales que proponen respuestas a la crisis de gobernabilidad. La primera, se orienta a explicar la crisis de gobernabilidad en la escasa o nula capacidad del gobierno para aminorar la sobrecarga de exigencias. Esto debido a la elevada expectativas que las comunidades se hacen respectos a las competencias y funciones del Estado.

El Estado amplían sus funciones cuando abarca o tiene presencia en todos los campos de la economía y los servicios, lo cual genera la sensación de un Súper Estado, que produce, comercializa y presta servicio en áreas básicas de la producción de bienes y servicios; pero así mismo, es el responsable de la salud, la educación, la cultura, las comunicaciones, turismo, entretenimiento y hasta del sistema de apuestas y juegos de invite y azar nacional.

Esta condición tiene un efecto pernicioso en el ciudadano, que se expresa en expectativas sociales crecientes en número y diversidad.

En ese contexto, la sobrecarga de exigencias en número y diversidad y, la escasa o nula capacidad del sistema político de satisfacerlas, por un lado erosionan la credibilidad en las prácticas y los operadores o funcionarios del Estado y, por otro lado, mengua la eficacia del gobierno para cumplir las promesas y objetivos de gobierno.

Estos dos aspectos son fundamentales a considerar, puesto, ante el cumulo de asuntos sobre los que el Estado en América Latina opera, hacen que la práctica política oficial se vea rebasada por creciente número y lo diversificado de las expectativas del ciudadano.

Esta dualidad responde, un primer aspecto, dado por el carácter dependiente del Estado Latinoamericano del capital internacional. Estados momo productores con limitadas posibilidades de competir en capacidad innovadora y productora de riquezas con el capital internacional, que doblega a sus gobiernos a seguir consumiendo las directrices de los organismos internacionales.

El segundo aspectos está en el agotado discurso de la derecha y la izquierda latinoamericano, que vuelcan su esperanzador ofrecimiento de bienestar a mesías providencial, aun en estos tiempos, presente en el escenario político de estas latitudes.

La fuerza con la que se desarrollan las prácticas políticas, tanto de funcionarios públicos como de los actores sociales que hacen participación en las comunidades se ha intensificado, llevando a una disgregación de intereses y a una declinación y fragmentación de los partidos políticos. Lo cierto es que, las exigencias del mercado y de la llamada sociedad civil sobre el sistema político con frecuencia constituyen demandas opuestas que elevan la tensión y el conflicto social.

Por otra parte, el hincapié que hacen los estados por aupar practicas vinculadas acciones comunicacionales y de participación comunitaria hacia áreas comprometidas con problemáticas como el combate a la pobreza, el alivio de los rezagos sociales y la extensión del bienestar, deben ser consideradas al momento de efectuar un análisis global de los problemas de la gobernabilidad democrática.

De allí que se deberá ponderar, el número creciente de individuos y grupos que tienden a participar y a dirigir sus demandas sobre el sistema político, y por otro lado orientar la práctica política del Estado, atenuar el impacto de las demandas en la comunidad.


viernes, 15 de abril de 2011

Estabilidad en la gobernabilidad (i)


La Estabilidad es resultado constitucional de la eficacia en la representatividad equitativa que los órganos del poder hacen del ejercicio de Gobierno, como acto racional sustentado en la inclusión, imparcialidad y justicia de dar a cada ciudadana la participación y el beneficio del bienestar.

Por estabilidad no solo vamos a comprender la previsible capacidad del sistema para durar en el tiempo, es fundamentalmente, la capacidad del Estado para mantener el orden constitucional de la convivencia dentro del orden cívico, compatible con el ejercicio de las libertades y garantías civiles y políticas, con fundamento en legitimidad ética de los funcionarios públicos. (José Meriño del Rio)

La estabilidad, al igual que la eficacia, se fundamenta en el Estado democrático y social de derecho, de respeto y protección de los derechos ciudadanos en el estricto apego a la Constitución y las leyes. La estabilidad tiene arraigo en la consecución de la conducta cívica del funcionario que honra el servicio que presta de forma responsable, justa, y equitativa.

De allí que en la caracterización de la democracia latinoamericana, salvo en gobiernos de facto, han estado presente para sustentar la estabilidad del sistema los siguientes factores:

a. Sistema de partidos o poli partidos.

b. Pluralidad en cuanto la orientación de los partidos.

c. Liderazgo de base institucional.

d. Alterabilidad en la posición del partido de gobierno.

e. Partidos poli clasista.

Casos puntuales donde se ha destacado un sistema del partido único, no aminoran la presencia de los factores antes citados, por el contrario se constituyen en ejemplo de inestabilidad democrática en la región.

Así mismo, citamos otros factores, tales como:

f. Eficacia del sistema político para reflejar resultados económicos y sociales acordes a la satisfacción de las necesidades del ciudadano

g. Movilización en torno a partidos políticos de organizaciones de la sociedad, como sindicatos y organizaciones comunitarias

h. Sistema electoral confiable

i. Formación de valores de la cultura política arraigados en la noción de democracia

Factores, que si bien no son únicos, muestran que la estabilidad no implica estancamiento del sistema político o ausencia de conflicto. La estabilidad devine del disenso y el consenso, de la legitimidad normativa de un Estado de normas consensuadas que permite sin la coerción de fuerza, solo la que está en los Tribunales de Justicia, darle coherencia a los actos sociales, hasta de los grupos disidentes de la sociedad.

El consenso se logra, no solo en la acción legítima del funcionario como poseedor del poder del Estado. No basta el ejercicio de la autoridad, el consenso es la razón del valor de la democracia como conducta de vida. Es en la actuación del consenso normativo lo que de estabilidad a la acción de la gobernabilidad democrática.

Las sociedades en su relación con el Estado pueden generar situaciones de conflicto por lo numeroso de las demandas en relación a los escases recursos destinados por el Estado para dar respuestas a las comunidades.

Frases sueltas al socialismo humano.


Qué es eso de aupar una lista o un carnet o hacer caritas y pararse en manos para ser “socialista”. El Socialista de convicción es profundamente respetuoso de la Dignidad Humana.

El Socialista de convicción no adula, hace listas o maromas para agradar; Lo que sí es un convencido del trabajo Creativo, Productivo, Colectivo y Socialmente Necesario.

El Socialista de convicción no busca cargos para humillar o privilegios personales y nepotismo o hacer uso indebido del dinero público. El Socialista es Integro, Responsable, Honesto e incorruptible.

En fin un Socialista de convicción cree en los poderes creadores del pueblo, la Dignidad Humana y el amor de Dios por sus Hijos.

El socialismo no es solo un modelo económico, no es una postura snobista. No es una carita risueña, subordinada y complaciente al poder autoritario del mesías de turno

Los líderes carismáticos, populistas, personalistas y autoritarios dependen para mantener sus gobiernos de la pobreza y prebendas prometidas a pueblo.

Quien da un golpe tiene dos opciones; O la victoria sobre el opresor o su vida para honrar a los que colleron por su causa.

He escuchado estos días comentarios, de uno y otro sector, despotricando del Socialismo. En lo personal creo en el socialismo, como sistema socioeconómicopolítico humanista, equitativo y justo. Jhu malo son quienes desconociendo la esencia del socialismo, quieran imponerlo desde arriba utilizando las mismas prácticas políticas del nepotismo, totalitarismo, personalismo, autoritarismo, corruptela, el “quítate tú, para ponerme yo”, el servilismo burocrático y la lista negra, la recuerdan. Prácticas políticas que se fundamentan en valores como la intolerancia, mezquindad, deshonestidad, delación, …que sirven para cualquier aberración , menos nutrir al Ser Humano digno que esta patria hermosa, prospera, necesita ahora, en este momento.