sábado, 10 de abril de 2010

Democracia Popular

Puente sobre el Lao de Maracaibo, José M Perozo P, 2009

Esta concepción de la Democracia Popular va a definir la concepción filosófica del modelo de Socialismo que se busca implantar en cuanto la formulación de Ser socialista a partir de la imposición ideológica del árbol de las tres raíces y su consecuente modelo endógeno de desarrollo.

Obviamente en la concepción socialista de la Democracia Popular, los soviets eran las instancias idóneas para la difusión y organización social con capacidad de asimilación, voluntad y constancia del colectivo revolucionario para poder sustituir la cultura representativa-capitalista, caracterizada por el clientelismo, pragmatismo y consumismo atado al ejercicio del poder de las cúpulas de poder.

La estabilidad democrática depende de la existencia de una cultura cívica con claras orientaciones cognitivas, emotivas y evaluadoras. Es la escuela, desde luego, el centro formador de tales saberes y capacidades prácticas.

La educación ética y cívica que forma ciudadanos capaces de propiciar con sus acciones sociales la consolidación y el sostenimiento de las instituciones democráticas es obra de la escuela. Y la educación básica es, sin dudas, en el
ideario de la modernidad, el periodo fundamental para su aprendizaje

Sin entrar en las consideraciones que formularon autores como Thomas Hobbes, Montesquieu o Jean Jacques Rousseau en la ética y la educación ha desarrolla dentro de la noción de cultura política está la conformación de la denominado de la conformidad social referida a la capacidad del juicio moral para responder a las expectativas que la familia y la sociedad tienen del estudiante.

El estadio de perspectiva sistémica en el que el juicio moral debe someterse a las leyes del sistema para contribuir de esa manera al bienestar de toda la sociedad.

El contrato social debe internalizarse hasta propiciar que los individuos acepten
Voluntariamente el contrato social vigente y persigan convencidos “el mejor bien posible para el mayor número de personas”. El último estadio lleva en el nombre la pretensión de la civilización occidental moderna, pues es el momento de los principios morales universales. Los juicios morales están aquí en coincidencia plena con los valores de libertad individual, igualdad, justicia y el respeto a la dignidad de las personas.

viernes, 2 de abril de 2010

La gobernabilidad democratica...


La gobernabilidad democrática se sustenta en la represión de la violencia, del abuso del poder, de la corrupción, menor populismo y discurso divisionista, de la coerción o el chantaje.

La democracia no requiere de la violencia para desarrollarse y consolidarse como sistema que garantice la paz.

Las relaciones entre gobierno democrático y la sociedad civil son de equilibrio dinámico. La gobernabilidad depende del entendimiento del bloque de poder y si este o una parte importante de él, se colocan en disenso y realizan oposición sustancial la democracia se puede convertir en ingobernabilidad.

Cualquier sistema democrático puede estar legitimado por elecciones, pero es susceptible a perder legitimidad de origen si caudillos hábiles o inescrupulosos golpean los puntos vulnerables aprovechando las alianzas corporativas, oportunistas de quienes entienden el sistema democrático de gobierno y oposición como el gran negocio de todos los tiempos.

El debilitamiento del sistema democrático no proviene de la pobreza, la inflación ni la corrupción (muy por el contrario pareciera que son el soporte fundamental del discurso populista para captar votos o bien de la oposición como del oficialismo), sino de la fractura del bloque del poder.

El consenso en ocasiones está sustentado en el irrespeto del Estado de Derecho, concentración de poder y corrupción moral, desvirtuando los valores principales del estado y del concepto de democracia que priva en la voluntad colectiva, pasando por encima de la personalidad moral de estado.

Llegando incluso a promover el desgobierno, desorden y aparente populismo judicial desde el poder central del gobierno para justificar actos vandálicos promovidos y amparados por funcionarios y operadores políticos del partido y grupos de partido en el poder, para justificar la ingobernabilidad de la democracia por la vía normal.

Cobra vigencia el presidencialismo, el ventajismo institucional (básicamente amparado en ventajismo judicial), lo cual debe ser eliminado para recobrar el orden institucional.

¿Cómo hacerlo con la conciencia colectiva inyectada del abuso del poder y la impunidad judicial? ¿Cómo sustentar el sistema democrático y el bloque de poder?

Otro factor importante en el desgobierno es la utilización del partido y los funcionarios que viniendo del partido, utilizan cargos públicos para actuar mas como operadores políticos más que funcionarios al servicio de ciudadano.






La Democracia se centra en los espacios de diálogos, consenso y disenso.

La quiebra del sistema democrático no es culpa de la pobreza, marginalidad, desempleo, sino de la estructura de poder y los operadores políticos incapaces de actuar más allá de sus intereses, Que la sociedad a la que engañan y timan, es a la que van de nuevo a exigirle que voten por ellos. Operadores políticos que se olvidan del bien común o de lo que llaman burlonamente el interés colectivo.

El pobre y la pobreza son utilizados como un recurso discursivo, cínico y populi
sta.